Ahora que estamos en plena época de elecciones, recordé que cuando estaba en la prepa, tuve mis primeros roces con la política. En esa época, en la Miguel Alemán González (MAG), cada año se hacían elecciones para escoger a los miembros de la Sociedad de Alumnos. (¡Gracias Norma, por recordarme el nombre!).
No me pregunten qué hacía el dichoso comité estudiantil. Nunca lo dejaban tomar parte en las decisiones de la escuela, no tenía un presupuesto para trabajar, y creo que sus únicas tareas relevantes eran: organizar el concurso para escoger a la Reina de la MAG y editar el “periódico estudiantil”, que en realidad era un grupo de hojas tamaño oficio mecanografiadas, llenas de chismes, mensajes y declaraciones de amor. Pero todos querían ganar.
Inicialmente y por tradición, los colores de las planillas (o sea, el equivalente a los partidos) eran: rojo o azul. Cuando una generación de prepa se iba, tercero de secundaria heredaba el color que había quedado libre. Pero cuando la prepa se hizo de tres años, las generaciones entrantes no supieron decidirse por un color. Pasaron por el naranja, amarillo, y creo que finalmente se quedaron con el negro.
Mi generación heredó el rojo.
Perdimos las elecciones en tercero de secundaria, en primero y segundo de prepa, hasta que finalmente llegó nuestra última oportunidad. Había una compañerita que siempre fue ajonjolí de todos los moles, y estaba decidida a que ese año íbamos a ganar… sí, estoy hablando de ti, Nelly Bustillos.
Esta historia continuará…
jueves, 11 de junio de 2009
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3 comentarios:
Insisto: "Devuélvanme mi infancia!!!!"
Ya continúala! El rato de esparcimiento que me proporcionan este y otros blogs es vital para mi buen funcionamiento...
Calma, calma!! Que no panda el cúnico! Tengo tanto que contar y tan poco tiempo disponible para hacerlo... jeje.
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