Comentando pedacitos de mi vida...

Daisypath Anniversary tickers

viernes, 5 de noviembre de 2010

¡Vive el Bicentenario a la Veracruzana!

¿Alguna vez te imaginaste que tu afición por las películas, específicamente por el cine mexicano, te haría pasar un fin de semana inolvidable? ¿No? Pues los ganadores de la promoción "Vive el Bicentenario a la Veracruzana" tampoco.

El pasado mes del bicentenario, estos afortunados cinéfilos adquirieron en Mixup algunas películas de cine mexicano marcadas con el sticker de la promoción. Participaron en una trivia y al tener las cuatro respuestas correctas, tuvieron derecho a entrar en la rifa de viajes con todo pagado a nuestro bellísimo estado.

Y miren qué preguntas tan sencillas y coquetas prepararon nuestros amigos de Veratur para que todos tuvieran chance de participar:

1. ¿Cuántas veces se considera heroica la ciudad y puerto de Veracruz?
a) 4 veces
b) 5 veces
c) 1 vez
d) 2 veces
e) ninguna

2. Mascota del equipo de futbol de Veracruz
a) Tiburón
b) Delfín
c) Halcón
d) Águila
e) Correcamino

3. Para bailar la bamba se necesita…
a) Un paliacate
b) Un poco de gracia
c) Una guayabera
d) Un sombrero
e) Vestir de blanco

4. ¿Ciudad Veracruzana Patrimonio Cultural de la Humanidad?
a) Xico
b) Coatepec
c) Tlacotalpan
d) Naolinco
e) Papantla

5. ¿Quien compuso la canción Veracruz?
a) Agustín Lara
b) Francisco Morosini
c) Lorenzo Barcelata
d) Mario Talavera
e) Salvador Moreno

Les presento a los ganadores y enseguida el nombre de su acompañante: Eduardo y Martha (DF); Miguel Angel y Alma Delia (GDL); Mauricio y Rocío (DF) y Alma Lilia e Ivonne (DF).


Empezamos con una deliciosa comida en "La estancia de Boca", donde pudieron probar un delicioso Queso Arriero Xalapeño, Tostones de Misantla, la especialidad de la casa: los Molcajetes y mi platillo favorito que sin temor a equivocarme, diría fue el consentido de todos: el Arroz Costeño.


Después nos fuimos al Acuario de Veracruz (el más grande de Latinoamérica) y ahí tuve la oportunidad de tomar una foto -no muy buena, por cierto, pero la más nitida que tengo- de una de mis habitantes consentidas del Acuario: Tina la nutria. ¡Me pone TAN de buenas verla jugar en el agua!


La pecera oceánica es impresionante:


Lamento "quemar" a mis queridos amigos del Acuario, pero es que este tipo de errores me sacan ronchas:


Quiero dar un reconocimiento a nuestro guía, Jorge de la Barrera, porque hizo el recorrido tan didáctico y ameno que por ejemplo, fue capaz de mantenernos diez minutos frente a este tiburón que antes solamente nos servía para tomar una foto y seguir de largo. ¡Estuvimos casi tres horas en el Acuario y se nos fueron rapidísimo!


La pecera de las medusas tiene un efecto tranquilizante e hipnotizador.


Historia curiosa: Jorge hizo el recorrido tan ameno, que en el camino se nos unieron varias personas de forma intermitente. A la hora de tomar esta foto, los intrusos se sentían tan integrados ¡que hasta se colaron en la foto! Son el chico de la camisa roja y su novia... ¡JA!


¿Cuánto mide un manatí?


La última atracción del Acuario de Veracruz: el delfinario.


Y dos de sus habitantes:


De ahí nos fuimos al zócalo para ver las parejas bailar en los Jueves de Danzón. Martha se consiguió un galán que la quería acaparar por toda una hora "para enseñarle en serio", pero terminó ofendiéndose porque no se pudo quedar con él más de una pieza.


¡Y no podía faltar el Café Lechero en La Parroquia! Acompañado de canillas y banderillas sabe mejor :)


Todos tenían en su poder el itinerario del viaje, pero nadie se imaginó lo que estaba por venir...

martes, 13 de julio de 2010

Ya me vi...!

Sólo a mí me puede ocurrir esto.
Compré dos boletos para el mismo sorteo de Melate... ¡ambos con los mismos números!.

Los compré en diferentes días pero eso no justifica mi burrada.
Hoy que me disponía a ver los resultados, me di cuenta de mi metida de pata. ¡Qué oso!

Lo bueno es que al menos tuvieron reintegro.
Lo malo es que sólo tuvieron reintegro.

lunes, 7 de junio de 2010

Los refrescos caducan

Con la finalidad de evitar la histeria que le provoca mi indecisión cuando se trata de escoger desde un tomate hasta una pasta de dientes, un día el esposo decidió que era mejor ir a hacer las compras él solito.

Al día siguiente, después de bañarse, entró a la recamara y bufando, anunció:

- Qué crees? El champú está cortado!

- Cómo que está cortado?

- Sí!! Está cortado, todo grumoso, y no hace espuma!

Mi primera reacción fue de incredulidad. Un segundo después recordé tooodas esas veces en que mis amistades me han visto como loca cuando descubro después de un solo sorbo que un refresco de dieta ya caducó. (A poco nunca revisan la fecha de caducidad de los refrescos? Nooo? Deberían, eh! Les sorprendería saber la cantidad de veces que he tenido que regresar un refresco Light porque ya caducó).

Tomando el papel de la esposa comprensiva y repasando la posible solución, le pregunté:

- Guardaste el ticket? Si ya caducó podrías ir a reclamar…

- Sí, ahí lo tengo… pero... ¡qué poca!

Mi curiosidad aumentó conforme su enojo creció. Ahora quería ver el champú cortado.

- A ver, enséñamelo!

El esposo regresó al baño a buscar la botella del champú cortado que no hacía espuma. Se vació un poco de la infame sustancia en la mano y efectivamente, de la botella salió una especie de engrudo blanco.

- Ves? Me dijo el esposo. Pinche champú cortado.

En eso, algo me hizo click en la cabeza.

Tomé la botella y después de un vistazo me eché a reir a carcajadas.

- ¿Qué?!

La risa no me dejaba hablar.

Volteando la botella hacia él, le señalé con el dedo la causa de mi risa: en letras más pequeñas que la marca del producto pero aún perfectamente legibles, estaba la palabra “Acondicionador”.

Ojalá pudiera decir que desde entonces, el esposo lee las etiquetas antes de comprar algo. Pero prefiere llevarme al súper y que yo me encargue de eso...

miércoles, 2 de junio de 2010

El primer motivo...

Esta es la primera razón por la cual mayo 2010 fue un mes para no olvidar jamás. La mujer más importante de mi vida cumplió años, y lo pudimos festejar en familia.


Creo que esta es una de mis fotografías favoritas en muuucho tiempo!

Mayo tuvo la culpa


Tal como lo había anticipado, mayo fue un mes que me dejó muchísimas vivencias increíbles. Tantas, que no me dejó tiempo para escribir... (sí, cómo no!)

Ok, ok... la verdad es que hace tiempo que mis dedos en el teclado no capturan las ideas de mi cabeza, pero de verdad que el mes de mayo me trajo TANTAS cosas lindas que sentí que me faltaron días en el mes! Espero poder tener tiempo ahora en junio para contarlas todas -o al menos, ¡la mayoría!.

Mientras termino de ordenar mis ideas, ahí les dejo a Myra Pocoyizada.

viernes, 30 de abril de 2010

Declaro la guerra en contra de mi peor enemigo, que es...

A propósito del Día del Niño recibí un correo que habla con nostalgia acerca de las frases que pronunciábamos en la niñez. Entre ellas, la que da título a esta entrada, y la conocida "un, dos, tres por mí y por todos mis compañeros".

Aunque el propósito del mail es recordarnos tiempos simples y felices, hubo una frase que me hizo pensar en las tempranas discusiones infantiles que no era fácil arreglar y donde siempre alguien terminaba enojado. La frase servía tanto para escoger (bueno), o eliminar (malo) a alguien. Nuestras decisiones se regían por un simple: "de tin marín, de do pingüé, cúcara mácara, títere fue... yo no fui, fue teté, pégale, pégale que ella merito fue".

Ustedes, ¿decían "merito", o no? ¿O era una "mapachada" que aplicaban a discreción, dependiendo de quién querían que ganara o quedara fuera?. En todo caso, era más legal el "Zapatito blanco, zapatito azul, dime cuántos años tienes tú" y dependiendo de la edad del señalado, se hacía el conteo y ¡aquí no había manera de hacer trampa!

También recordé un juego de manos al que por cierto le falta el final (¡no lo recuerdo!):
Pedro Infante ya murió
fue estrellado en un avión
María Luisa le lloró
su mamá se desmayó
cuántas velas le prendieron?
Una, dos, tres, cuatro
En la calle veinticuatro
una vieja mata un gato
con la punta del zapato
su zapato se rompió...
(¿alguien sabe cómo termina?)

O si no, el comercial que -al menos mis amigas y yo- hicimos juego de manos:
Mira todo el mundo
comiendo sus Sabritas
son las papas fresquecitas
que tienen un sabor sin igual
sensacional!
a que no puedes comer sólo una
a que no puedes comer sólo una
Sabritas, papas Sabritas,
a que no puedes comer sólo una!

Claro que al menos, iba acompañado de una coreografía medio complicada. Hace poco se la quise enseñar a mis sobrinas, y ¡zas! que me enseñan un juego más sofisticado... siempre perdí, me hice bolas... ¡me frustré!

Bueno, ya me voy a jugar un rato hacer cosas de adulto antes de que la nostalgia no me deje levantarme de la silla.

miércoles, 14 de abril de 2010

Soy una Gleek!!

Esperando el inicio de la segunda temporada de Glee, me encontré con esto:



"Will Schuester, I hate you"... ¡¡la mejor frase de la canción!! ¡No puedo esperar a su estreno en México!

martes, 13 de abril de 2010

Mayo: te espero!

Tengo muchas razones para creer que mayo será un mes fenomenal. Pero me conformo con hacer públicas solamente dos.

Esta es la primera:


Y esta es la segunda:

Obviamente, el esposo solamente está emocionado con una.

martes, 30 de marzo de 2010

Las pre-campañas electorales

No se asusten, recuerden que este no es un blog que se interese por la política. Más bien, esta entrada se dedicará a darle seguimiento (¡después de un año!) a la que publiqué hace tiempo recordando mis incursiones en la política estudiantil. Y va con dedicatoria especial a nuestro grupo en Facebook "Porque mis mejores recuerdos de 86-92 son en la MAG".

Como les había contado, Nelly estaba segura de que ese (1992) sería nuestro año. No había de otra. Era nuestro último año en la escuela y era ganar o morir!

Tal vez por el carisma que siempre ha tenido, tal vez por el hartazgo que ya teníamos por llevar varias elecciones perdidas, el caso es que Nelly logró reclutar a unas cuantas personitas para empezar a hacer el material promocional con el que íbamos a conquistar el voto. Una de las cosas que más me sorprendió al llegar a casa de Nelly, es que ¡había muchos cascarones de huevo!


Lo cual nos daba una idea de cuánto tiempo llevaba Nelly preparando nuestra estrategia...¡bien por ella!. Empezamos entonces a rellenarlos de confeti (no faltó quien quisiera llenarlos de harina) y pintarlos de nuestro color. Y para que vean que no solamente las mujeres le entramos a las manualidades, aquí tienen la prueba de lo contrario:

Lo mejor de este trabajo fue la integración. Ahí no importaba si éramos o no mejores amigos. Cuando se trataba de nuestra planilla, todos eramos ¡LA ROJA!


Esta foto es una muestra de la creatividad de Liliana (está haciendo una peluca de papel de china), pero lo que yo realmente quiero saber es de quién caramba son las botas:

Mientras nosotros nos dedicábamos a esto, en otra sede, varios chicos se encontraban pintando mantas. No me pregunten -mejor dicho: ¡refrésquenme la memoria!: ¿de dónde salían los recursos para comprar pintura, cartulinas, mantas, brochas, pinceles, etc...?? Digo, nosotros no teníamos sindicatos a quienes sacarles una cuota 'pal candidato', ni recursos qué desviar...

¡¡Ah, pero cómo nos divertimos!!

Sí, la peluca parece como para Daniela Romo, pero ya la verán en acción en el siguiente post, cuando vean qué buen d*madre armamos. ¡¡Espero no tardarme otro año!!