Sí, lo confieso: me encantaba Michael Bolton.
Sí, con su mullet y todo. No me importaba su cabello (además en ese entonces estaba de moda), me fascinaba su voz tan romántica.
Ya lista para ir al concierto y mientras mi mamá se terminaba de arreglar, decidí marcarle a un viejo amigo que había abandonado las suradas de Coatza para estudiar en el ITAM, para saludarlo. Después de los saludos de rigor, la pregunta obligada:
- ¿Y qué te trae al DF?
- (conteniendo un grito de emoción y tratando de sonar muy cool) Vine al concierto de Michael Bolton...!
(pausa)
-¿En serio?
- ("oh Dios, alguien más que criticará mi gusto por Michael") Sí , me gusta mucho cómo canta...
(otra pausa)
- Es que...
- ¿Qué? (además me gusta Phil Collins, ¿también eso te parece criticable?)
- Es que yo escuché que el concierto de Michael Bolton se había cancelado...
Mis gritos se escucharon hasta Chihuahua...
Ok, no es cierto. Pero si hubiera podido gritar a lo mejor sí.
Una llamada a Ticketmaster lo confirmó. El concierto se había pospuesto. Para mi mala suerte, se había movido a una fecha en la cual no podía regresar. Tuvimos que tramitar la devolución del dinero. Y antes de que alguien pregunte: no me enteré antes porque era una niña de provincia, que solamente leía los periódicos locales y aún no había descubierto internet.
Cuando Michael Bolton regresó a México en 2008, lo castigué con el látigo de mi desprecio.
5 comentarios:
Mejor agradece que no lo hayas visto...tu cerebro pudo haber sufrido daños irreparables.
Et tu, Brute?
Ah carambolas!
Me tienes que explicar en cuál de todos los sentidos (interpretaciones de la frase) me lo dices: maldiciendome, sorprendida, amenazandome o....como gag de Asterix :P
Decepcionada... =(
Sí me gusta, Y QUEEEE!! :P
Yo respeto, no te preocupes para gutos se hicieron los colores...no pretendía incordiar ;)
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