Con la finalidad de evitar la histeria que le provoca mi indecisión cuando se trata de escoger desde un tomate hasta una pasta de dientes, un día el esposo decidió que era mejor ir a hacer las compras él solito.
Al día siguiente, después de bañarse, entró a la recamara y bufando, anunció:
- Qué crees? El champú está cortado!
- Cómo que está cortado?
- Sí!! Está cortado, todo grumoso, y no hace espuma!
Mi primera reacción fue de incredulidad. Un segundo después recordé tooodas esas veces en que mis amistades me han visto como loca cuando descubro después de un solo sorbo que un refresco de dieta ya caducó. (A poco nunca revisan la fecha de caducidad de los refrescos? Nooo? Deberían, eh! Les sorprendería saber la cantidad de veces que he tenido que regresar un refresco Light porque ya caducó).
Tomando el papel de la esposa comprensiva y repasando la posible solución, le pregunté:
- Guardaste el ticket? Si ya caducó podrías ir a reclamar…
- Sí, ahí lo tengo… pero... ¡qué poca!
Mi curiosidad aumentó conforme su enojo creció. Ahora quería ver el champú cortado.
- A ver, enséñamelo!
El esposo regresó al baño a buscar la botella del champú cortado que no hacía espuma. Se vació un poco de la infame sustancia en la mano y efectivamente, de la botella salió una especie de engrudo blanco.
- Ves? Me dijo el esposo. Pinche champú cortado.
En eso, algo me hizo click en la cabeza.
Tomé la botella y después de un vistazo me eché a reir a carcajadas.
- ¿Qué?!
La risa no me dejaba hablar.
Volteando la botella hacia él, le señalé con el dedo la causa de mi risa: en letras más pequeñas que la marca del producto pero aún perfectamente legibles, estaba la palabra “Acondicionador”.
Ojalá pudiera decir que desde entonces, el esposo lee las etiquetas antes de comprar algo. Pero prefiere llevarme al súper y que yo me encargue de eso...
lunes, 7 de junio de 2010
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2 comentarios:
Curiosa historia...a mi también me pasó una vez, jeje.
Por cierto, los refrescos NO caducan. Acabo de tomar uno que caducaba en agosto de 2010... ya estaba abierta, iba a la mitad y la encontré en la parte de atrás de mi refrigerador.
Me dio un poco de miedo, pero la probé y sabía bien.... lógico que no tenía gas, pero fuera de eso estaba en perfecto estado :)
Jeje... Bueno, por algo les ponen fecha de caducidad, no? ¡También al agua embotellada! No sé el propósito pero te puedo asegurar que al menos el refresco Light no sabe igual después de esa fecha... ¡Qué bueno que tu refresco no sabía mal! :)
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